Hemos estado practicando los gentilicios en el aula de informática. Este era el ejercicio, para que lo terminéis:

Hemos dedicado la clase a explicar el adjetivo con el esquema que debéis haber copiado en el cuaderno.

Si mañana tenemos el libro, leeremos. Si no, corregiremos los ejercicios 2 de la página 68 y 2 de la página 69. Podéis descargar la primera mitad del libro en la web e la editorial: http://www.literaturasm.com/El_rostro_de_la_sombra_Promo.htm (pinchad en el icono que hay al lado de «En PDF»)

Hoy hemos empezado a trabajar el adjetivo después de ver un poco de formación de palabras, con esos prefijos y sufijos que aparecían en los ejercicios.

Para el lunes que viene tenéis que hacer los siguientes ejercicios:

• Pág. 67, ej. 1.
• Pág. 70, ej. 1.
• Pág. 71, ejs. 1 y 2.
• Pág. 77, ej. 1.

Después de unos días de mucho lío, en los que he tenido este blog un poco abandonado, recuperamos el ritmo. Hoy hemos estado trabajando los esquemas a partir del texto de Gandhi y para mañana tenéis que hacer los ejercicios 1 de la página 68 y 1 (sí, es el mismo número pero es otro ejercicio) de la página 69.

Hoy deberíamos haber estado leyendo El rostro de la sombra pero como la mayoría de vosotros ha optado por no traerlo, hemos seguido con los elementos narrativos.

Hemos corregido los deberes y hemos empezado a trabajar los elementos narrativos.

Hemos seguido trabajando las coplas y las adivinanzas, puesto que seguís sin traer el libro. Para el próximo viernes tendréis que haber leído hasta la página 50.

Hoy hemos trabajado las adivinanzas, tanto las del libro como las que habéis pensado vosotros. Después he intentado que veáis cómo podemos escribir una adivinanza haciendo que cuadre en la estructura de una copla: 8- 8a 8- 8a.

Mañana tenéis que traer vuestra adivinanza y el libro para seguir leyendo.

Hoy hemos acabado el tema 3.  Hemos fijado el examen para el miércoles que viene y para mañana tenéis que hacer los ejercicios 3 y 4 de la página de las adivinanzas.

Esta es la historia. La pregunta es: ¿esta historia de los monos se puede aplicar a los seres humanos?

En cierta ocasión se llevó a cabo el siguiente experimento de comportamiento. Se colocaron 6 monos en una jaula, en el centro de la cual se encontraba una escalera que permitía alcanzar un racimo de plátanos que colgaba del techo. En cuanto uno de los monos intentaba alcanzar los plátanos, se les rociaba a todos con agua helada lo cual hacía que desistiera de su intento. Este proceso se repitió tantas veces cómo intentos por alcanzar los plátanos realizaron los monos. Finalmente, cuando alguno de los monos intentaba alcanzar los plátanos, eran sus propios compañeros los que le impedían acercarse a la escalera a base de golpes hasta que el mono desistía de su intento.

Llegados a este punto, se saca uno de los monos de la jaula y se introduce otro que evidentemente no había participado previamente en el experimento. Al poco de entrar en la jaula, el mono intenta encaramarse a la escalera para tomar los plátanos, pero en cuanto se acerca a la escalera, sus compañeros le agreden a golpes ante la posibilidad de una ducha helada. El nuevo mono no entiende nada, pero tras varios intentos se da cuenta de que no se puede acercar a los plátanos a menos que desee ser vapuleado.

En este momento, se saca de la jaula otro de los monos que empezaron el experimento y se introduce uno que tampoco tiene ningún conocimiento del funcionamiento del mismo. Igual que en el caso anterior, el mono intenta agarrar los plátanos y cada vez que lo intenta, todos sus compañeros de jaula se abalanzan sobre él para impedírselo. La nota curiosa es que el mono que introdujimos a mitad del experimento y que no tiene la experiencia de haber sido rociado con agua helada también participa en la agresión aunque sin saber porqué. Para él, simplemente, no está permitido acercarse a la escalera.

Poco a poco se van sustituyendo todos los monos que comenzaron el experimento por otros que no han experimentado en ningún momento el hecho de haber sido rociados con agua helada. Cuando se sustituye el último mono de la jaula, el comportamiento de los simios continúa igual, a poco que el nuevo mono intenta acercarse a la escalera es vapuleado por sus compañeros, aunque llegados a este momento, nadie sabe por qué. Si les preguntaran, tal vez responderían: «No sé, aquí siempre se ha hecho así».

Puesto que no teníamos los libros suficientes, hemos seguido dando clase.