Antes de seguir leyendo, te recomiendo que les des a tus oídos un gusto, y te des un paseo por esta lista de reproducción:
Ahora que tenemos el ambiente correcto, os pondré en situación. Evan Hansen es un adolescente de último año de instituto. Debido a una carta que nunca debió ser vista, se ve arrastrado dentro del torbellino que sigue al suicidio de un compañero de clase, Connor Murphy. Para consolar a sus padres, Evan deberá fingir haber sido su mejor amigo.
La música y la letra de esta producción son por Pasek and Paul, con Grammy gracias a City of Stars de La La Land, con el libreto por Steven Levenson. Ben Platt, quien muchos conoceréis por Dando la Nota, da vida al personaje principal, con una voz y una expresividad desgarradora en todo momento.
Dear Evan Hansen ha sido el musical favorito de la temporada, ha conseguido, ni más ni menos, nueve nominaciones para los premios Tony de este año. Sin duda, merecidos.
Antes de que os tiréis de los pelos debido al muy controversial tema del suicidio, ya tratado en una serie muy conocida, dejadme decir algo. Aunque Dear Evan Hansen parece tener una trama oscura, o triste, es alegre y emocionante. Trata más sobre Evan, que sobre el suicidio de Connor. Cómo una persona puede sentirse sola, y cómo todos los personajes, en algún momento, tienen algo de lo que lamentarse. Sin embargo, para todos ellos, la vida sigue de una manera u otra. Es un musical que hace reír, y llorar y sentirse comprendido.
Así que, si tenéis la suerte de ir a Broadway alguno de estos días, os recomiendo que os paséis por el teatro.