Pleno de la cantante Adele, ganando los cinco premios a los que estaba nominada.
La cantante británica se llevaba la pasada madrugada del trece de febrero los cinco Grammy a los que ella aspiraba.
“Gracias a todos desde lo más profundo de mi corazón” dijo la cantante emocionada. Pero a aunque se llevase el premio, decidió que quien tenía que llevárselo era Beyoncé, ya que ella consideraba, que el mejor álbum era el de ella.
“Beyoncé, te adoro, emocionas mi alma cada día desde que tengo 17 años. Quiero que seas mi mamá”, confesó Adele en la entrega del premio.
Otro protagonista de estos premios fue Chance the Rapper, que consiguió los premios al mejor artista nobel, mejor álbum rap (Coloring book).
Sin duda, el momento más comentado de la gala fue la acctuación de Beyoncé como diosa dorada de la fertilidad, emocionando al público con los temas ’Love Drought’ y ’Sandcastles’, para ceder el testigo poco después a una espectacular Katy Perry, que presentó su nuevo sencillo ’Chained to the Rhythm’.
No faltaron las críticas a Donald Trump.
Especialmente poderosa fue la valiente escenografía de A Tribe Called Quest y Busta Rhymes, que tiraron abajo un muro, hablaron sobre el poder de las minorías y enviaron un mensaje de diversidad al mandatario, a quien denominaron “presidente naranja”.
Katy Perry actuó ataviada con un brazalete que decía “Resiste”, mientras de fondo aparecían las palabras “We The People” junto a otras referencias a la constitución de Estados Unidos. E incluso Jennifer López aseguró que vivimos un momento donde las voces de los artistas “son más necesarias que nunca”.