Cuarto Ve

La edad mínima para empezar a beber ya ha bajado hasta los 13 años

Un grave problema que, en vez de ser vigilado, ha ido aumentando, es el consumo de alcohol en chavales de nuestra edad, o incluso en bastante menores.
Esta misma tarde leía el editorial de El País sobre este tema y me ha quedado claro que por mucha ley que queramos aplicar,  que encima llega tarde dejando que la edad de inicio baje hasta los 13 años, el quid de la cuestión reside en la sociedad.

Desde mi punto de vista y por experiencia propia contemplo cómo entre compañeros y amigos es común beber alcohol de vez en cuando, si no muy usualmente, o emborracharse totalmente con frecuencia y demasiado pocos se dan cuenta de que la concienciación es insuficiente, que a muchos les sigue importando bien poco su salud al respecto. Pero el verdadero problema reside en los padres.

Si bien por falta de control, desinterés o despreocupación, estoy convencido de que los padres de estos muchachos no son capaces de evitar que sus hijos beban a escondidas; pero peor aún es cuando el propio adulto ve normal el consumo en sus hijos. Desde pequeñito me llevan ofreciendo un sorbo de champán en fiestas y ya hace unos años si pido una cerveza (muy de vez en cuando) no me ponen pegas. Sobre todo en fiestas, son más mis familiares acostumbrados a beber, y mayores que yo, los que insisten en ofrecerme bebidas alcohólicas. «Total, es una fiesta; no pasa nada de vez en cuando». E incluso yo mismo ya comparto esa mentalidad.

Pero esa irresponsabilidad de parte de familiares (y amigos, pero estos no con tanta influencia) de tender a quitar importancia al problema es una gran puerta para que chicos jóvenes vean normal el consumo usual de alcohol; que lo vean como un juego y, por supuesto, algo divertido asociado a las fiestas, cuando la realidad debería ser todo lo contrario.  Y mientras este problema siga exisitiendo seguirán apareciendo formas de saltarse la ley.

¿De verdad nos preocupa el consumo de alcohol en menores, o preferimos «divertirnos» con ellos o, en el caso de otro grupo de personas, beneficiarse del dinero que mueven? Porque muchos oirán que es un problema, pero muchos más escucharán que es lo más normal del mundo, y que «no pasa nada».